Un grupo de expertos analizan el futuro de seis ríos mediterráneos ante el cambio global

Casi un centenar de expertos de una docena de países, enrte ellos España, participan hoy en Barcelona en la primera reunión del proyecto europeo Globaqua, que estudia la gestión del agua ante el cambio climático global tomando como referencia seis ríos mediterráneos.

El proyecto está liderado por el profesor de investigación del CSIC en el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA) Damià Barceló y estudiará las cuencas del río Ebro (España); del Evrotas (Grecia); el Sava, afluente del Danubio que transcurre por Eslovenia, Croacia, Bosnia y Herzegovina y Serbia); el Adigio (en el noroeste de Italia); el Anglian (Reino Unido), y el Souss Massa (Marruecos).

Con un presupuesto de 7,5 millones de euros y la participación de 23 centros de investigación, el proyecto tratará de dibujar cuáles son los escenarios futuros en una situación de cambio global y cómo afectarán a la disponibilidad del agua, su calidad y cantidad.

El proyecto analizará los diferentes factores de estrés, a quién o qué afectan, sus consecuencias y cómo se gestiona todo, y para hacer las simulaciones, los científicos tomarán como referencia los diferentes escenarios climáticos planteados por el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC en sus siglas en inglés).

Las seis cuencas fluviales escogidas para el estudio tienen realidades ambientales y socioeconómicas diferentes y problemáticas específicas, muchas extrapolables a otros ríos.

El proyecto Globaqua estudiará aspectos hidrológicos (cantidad de agua disponible, calidad y su contaminación), pero también estudiará la geomorfología del suelo, un aspecto al que no siempre se ha prestado la atención necesaria, y que incluye aspectos como las edificaciones o infraestructuras junto al río, los sedimentos, el lecho, la vegetación de las riberas o la construcción de embalses.

Otros factores de estrés que serán analizados son la presencia de patógenos, la explotación de aguas subterráneas, la alteración en el uso del suelo.

Los científicos analizarán estos cambios que afectan a la biología y el funcionamiento del ecosistema, y los servicios que ofrece a la sociedad (agua, pesca, ocio, energía...), y también estudiarán las implicaciones de la pérdida de biodiversidad y sus efectos sobre el bienestar de la sociedad.

En España, además del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC), también participan en el proyecto el Instituto Catalán de Investigación del Agua, la Universidad de Barcelona y la Universidad del País Vasco.

 

Fecha: 

19/02/2014